Al igual que en nuestro post anterior sobre la elección de la válvula de extrusión, en el caso de las válvulas de pulverización o spray también debemos tener en cuenta ciertos parámetros, de esta manera podremos determinar cuál de ellas nos puede dar el resultado que estamos buscando en nuestra aplicación. Para ayudarte, enumeraremos los 5 parámetros que debes considerar.

1. Fluido

El primer paso es definir el fluido a pulverizar, ya sea agua, alcohol, cola, tinte, pintura, adhesivo, grasa, o cualquier otro. Con esta información podremos determinar el tipo de sellos, el tamaño de la aguja, y el tipo de boquilla. Hay que tener en cuenta que para fluidos de baja viscosidad suelen utilizarse diámetros de salida menores en comparación con fluidos más espesos, como por ejemplo una grasa. Además, no se pueden usar las mismas boquillas de salida de fluido para un adhesivo que para un lubricante.

2. Presión de alimentación

El primer paso es definir el fluido a pulverizar, ya sea agua, alcohol, cola, tinte, pintura, adhesivo, grasa, o cualquier otro. Con esta información podremos determinar el tipo de sellos, el tamaño de la aguja, y el tipo de boquilla. Hay que tener en cuenta que para fluidos de baja viscosidad suelen utilizarse diámetros de salida menores en comparación con fluidos más espesos, como por ejemplo una grasa. Además, no se pueden usar las mismas boquillas de salida de fluido para un adhesivo que para un lubricante.

3. Tipo de válvula

Debes decidir si necesitas que la válvula esté equipada con una electroválvula incorporada o no. Ten en cuenta que las válvulas con electroválvula ofrecen una respuesta más rápida. Si optas por esta opción, es importante especificar la tensión requerida; ofrecemos opciones en 24VDC, 110VAC y 230VAC.

4. Patrón de pulverizado

Posteriormente debemos ver que patrón de pulverizado necesitamos, podemos ofrecer cinco soluciones distintas:

Calentador del cuerpo:
Dependiendo de la viscosidad del fluido, puede ser necesario calentar el cuerpo para reducir la viscosidad y facilitar su dosificación.

Sensor de posición de la aguja:
Te informa cuando la aguja se mueve, asegurando que la válvula está funcionando correctamente.

Presostato:
Un transmisor de presión mide en tiempo real la presión dentro de la válvula, convirtiéndola en una señal eléctrica para detectar caídas de presión, fugas o verificar el funcionamiento del sistema.

Puerto de recirculación:
Algunos fluidos requieren movimiento continuo para evitar que se sequen o se separen con lo que se puede suministrar la válvula con una conexión adicional para este fin.

Temporizador neumático:
Se conecta a una fuente de aire comprimido y regula el tiempo de activación y desactivación del control, es decir, la apertura y cierre de la válvula, así como la duración del spray, permitiendo ajustar de manera independiente los tiempos de pre y post spray.

Alimentación por cartucho:
Ideal para fluidos más líquidos, que pueden conectarse directamente a la válvula mediante un soporte con un pequeño depósito en formato de jeringa o cartucho. Es una solución sencilla y económica para bombear fluido hasta la válvula.

Determinados estos cinco puntos clave, podemos seleccionar cual sería la mejor válvula de pulverización para una aplicación específica.